Balsamocarpon brevifolium

 

Introducción

La sustentabilidad ecológica del planeta es altamente dependiente de la mantención de la biodiversidad. A nivel global, regional y local, en conjunto, los organismos vivos, desde los microorganismos hasta las plantas y animales superiores, determinan la productividad de los ecosistemas, controlan los ciclos de nutrientes y afectan la estabilidad climática.

Además de proveer numerosos servicios ecosistémicos de gran envergadura, la biodiversidad proporciona una incalculable fuente de bienes a la humanidad que tiene la potencialidad de contribuir a la consolidación y expansión de las economías locales. Tales bienes incluyen fibras, madera, colorantes, medicinas, especies de valor en la floricultura y horticultura. Las especies de plantas y animales de una región, a su vez, imprimen un carácter particular a sus ecosistemas, determinando paisajes muy característicos y frecuentemente únicos, lo que es de gran relevancia en los países cuyas economías se apoyan en el turismo convencional y eco-turismo, como es el caso de Chile.

Biodiversidad

Formalmente, la diversidad biológica o "biodiversidad" se define como la variedad y variabilidad entre los organismos vivos y los complejos ecológicos en los cuales estos organismos se encuentran. La biodiversidad incluye la diversidad entre y dentro de las especies tanto al nivel de taxa, como al nivel de poblaciones y genes, y entre y dentro de los ecosistemas, considerando sus respectivas comunidades y agrupaciones mayores, tales como las eco-regiones y biomas. En términos simples, la biodiversidad es la suma total de toda la variación biológica desde el nivel de genes individuales a ecosistemas.

Magnitud de la Biodiversidad Mundial

La biodiversidad se ha acumulado paulatinamente sobre la tierra desde la aparición de las primeras bacterias hace 3.500 millones de años. La variedad de genes, poblaciones y especies es el resultado de la evolución orgánica, mientras que la variedad de ecosistemas es el producto de numerosos procesos ecológicos e interacciones entre organismos que conducen a la organización de las especies en complejos funcionales. Para aproximadamente 2/3 de la historia de la tierra, la biodiversidad consistía en organismos unicelulares organizados en comunidades muy simples. Los organismos multicelulares aparecieron en el mar hace unos 1.700 millones de años, y posteriormente colonizaron los ambientes terrestres. La evolución de organismos de creciente complejidad, en especial en el medio terrestre (por ejemplo, las plantas y animales superiores), conllevó al desarrollo de comunidades y ecosistemas cada vez más estructurados y complejos en cuanto a las interacciones entre sus diversos componentes. Se estima que el número total de especies que se encuentra actualmente sobre la tierra es del orden de 14 millones; sin embargo, solo unos 1,75 millones de especies han sido descritas por los científicos. La biodiversidad conocida a nivel de especies consiste en 4.000 especies de bacteria, 80.000 de protistas, 270.000 de plantas, 72.000 de hongos, y 1.320.000 de animales. A estos números, algunos expertos agregan unas 4.000 virus. Hasta el presente, se han descrito unas 29.000 especies en Chile, un número que sin duda subestima la real riqueza biológica del país.

Amenazas sobre la biodiversidad

La biodiversidad está fuertemente amenazada por alteraciones antrópicas y que las acciones del hombre serían responsables del sexto mayor evento de extinción en la historia de la vida. De allí la importancia de desarrollar estrategias nacionales y regionales para conservar la biodiversidad en todos los niveles jerárquicos. A la alteración del hábitat, hay que sumar los efectos del cambio global en temperatura y los patrones de precipitación, los que están ocurriendo a tasas más rápidas que la capacidad biológica de las especies de responder. De hecho, tal vez la principal razón para mantener la biodiversidad se relaciona con la adaptabilidad futura. Como resultado de la combinación de cambios en el clima y la alteración de hábitat, están apareciendo nuevas de condiciones ambientales que no existían en el pasado. Generalmente, los procesos evolutivos son demasiado lentos para la generación de nuevas especies capaces de ocupar estos nuevos ambientes. La mantención de la biodiversidad regional otorga mayor seguridad de que habrá grupos de organismos funcionales para acomodarse a las nuevas condiciones a través de la dispersión y migración.

Biodiversidad de la IV Región de Coquimbo

En cuanto a su biodiversidad, la IV Región de Chile es indudablemente una de las Regiones más interesantes del país. El sector de Chile comprendido entre 25º-40º S (incluyendo la franja costera hasta 19,5º S) contiene 3.429 especies de plantas de las cuales 1.605 (46,8%) son enteramente restringidas (es decir endémicas) en su distribución a esta zona. Para animales, más de 50% de los anfibios y reptiles están restringidas a esta zona. En base a la caracterización anterior, esta zona de Chile es reconocida entre las 25 "hotspot" (áreas de alta concentración) de Biodiversidad a Nivel Mundial para Prioridades de Conservación". La alta diversidad y endemismo de plantas vasculares en el "hotspot" chileno se relaciona con la alta heterogeneidad climática y topográfica, cambios climáticos recurrentes en el pasado, y la naturaleza de Chile como una isla biogeográfica. Dentro del hotspot chileno, la IV Región ocupa una posición central, a la vez, muy particular. Situado en la zona transicional entre la región mediterránea propiamente tal, y las áreas más desérticas hacia el norte, la IV Región reúne un amplio espectro de elementos biogeográficos, numerosos géneros que han experimentado radiaciones evolutivas significativas y, al mismo tiempo, comunidades relictas que contienen especies más típicas de los bosques del sur del país. A la vez, pueden esperarse en la IV Región muchas especies representadas por sus límites norte y sur de distribución. Estas últimas características, sumada a una geografía muy heterogénea determinarían un gran nivel de endemismo a nivel regional y muchas especies susceptibles a reducciones de hábitat.

Protección de la biodiversidad

La protección y conocimiento de la biodiversidad representa una tarea prioritaria de las naciones comprometidas en alcanzar un desarrollo sustentable que asegure el bienestar humano y de los recursos y sistemas naturales con los que interactúa. La promulgación en 1994 de la Ley 19.300 de Bases Generales del Medio Ambiente, sumado a la firma de varios convenios internacionales para la protección del medioambiente, ha puesto Chile dentro de los países líderes en la conservación de la biodiversidad a nivel mundial. Dentro de éste contexto el Gobierno Regional de Coquimbo, a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional financió el estudio: "Actualización de la Flora Nativa en Categoría de Conservación, código B.I.P. 20146564-0" en la cual la Corporación Nacional Forestal - IV Región actuó como Unidad Técnica, y la Universidad de La Serena como Unidad Ejecutora.

La conservación de la biodiversidad implica tanto la mantención de las especies que conforman los ecosistemas, como la preservación de la estructura y funcionalidad de los ecosistemas. Estos dos objetivos son complementarios en el sentido que la conservación de las especies es esencial para la mantención de la integridad de los ecosistemas, mientras que la mantención de la integridad de los ecosistemas, es fundamental para prevenir la extinción local y global de las especies.

Objetivo del Estudio

Dada la naturaleza de la tarea encomendada, este estudio es enfocado al conocimiento y definición del estado de conservación de las especies, y detección de áreas de riqueza y centros de endemismo.

Los objetivos generales de este estudio son: a) establecer el estado de conservación de la flora vascular nativa de la IV Región de Coquimbo y, b) definir los sitios prioritarios para la conservación de la flora con problemas de conservación.

Categorías de Conservación

En este trabajo se consideran las siguientes categorías de estado de conservación basadas en el riesgo de extinción:

Extinta (EX): Una especie se considerará Extinta cuando, efectuada su búsqueda exhaustiva, mediante métodos y en lugares y tiempos adecuados, no exista duda razonable de que ningún individuo de la misma existe en la región.

En Peligro (EP): Una especie esta En Peligro cuando enfrenta un muy alto riesgo de extinción en el estado silvestre en un futuro inmediato o cercano. Determinado a través de un análisis cuantitativo (p.e., un análisis de viabilidad poblacional, AVP), En Peligro de extinción se considera a una especie que presenta una probabilidad de extinción en el estado silvestre de por lo menos un 20% dentro de los siguientes 20 años o 5 generaciones, en organismos de gran tamaño o longevidad mayor a 3 años, o durante los siguientes 10 años o 10 generaciones en organismos de menor tamaño o longevidad menor a 3 años, seleccionando la estimación que entregue la mayor probabilidad de extinción.

Vulnerable (VU): Una especie se considerará Vulnerable cuando, aún sin poder ser clasificada en la categoría En Peligro, manifieste un retroceso numérico que puede conducirla al peligro de extinción en el estado silvestre en el mediano plazo. Una especie se considera Vulnerable cuando tiene una probabilidad de extinción en el estado silvestre de por lo menos un 10% dentro de los siguientes 100 años o 5 generaciones, en organismos de longevidad mayor a 3 años, o durante los siguientes 100 años o 10 generaciones en organismos de longevidad menor a 3 años, seleccionando la estimación que entregue la mayor probabilidad de extinción.

Fuera de Peligro (FP): Una especie se considerará que como Fuera de Peligro cuando exista evidencia de que no experimentará riesgo de extinción en un futuro cercano. Se considerará que una especie se encuentra Fuera de Peligro si la especie tiene una probabilidad de extinción en el estado silvestre menor a un 10% dentro de los siguientes 100 años o 5 generaciones, en organismos de longevidad mayor a 3 años, o durante los siguientes 100 años o 10 generaciones en organismos de longevidad menor a 3 años, seleccionando la estimación que entregue la mayor probabilidad de extinción.

Insuficientemente Conocida (IC): Una especie se clasificará como Insuficientemente Conocida si no existe información suficiente que permita categorizarla como Extinta, En Peligro, Vulnerable, o Fuera de Peligro y un panel de expertos concluye que el taxón en cuestión no es conocido adecuadamente como para asignarle una categoría en base a los criterios antes mencionados, lo cuál no implica que se encuentre Fuera de Peligro. De hecho, el panel de expertos tendrá la posibilidad de sugerir alguna de las siguientes sub-categorías cuando exista información complementaria que lo sustente:

  • •Insuficientemente Conocida (Extinta?), IC(EX?)
  • •Insuficientemente Conocida (En Peligro?), IC(EP?)
  • •Insuficientemente Conocida (Vulnerable?), IC(VU?)
  • •Insuficientemente Conocida (Fuera de Peligro?), IC(FP?)

No Evaluada (NE): Una especie se categorizará como No Evaluada cuando no ha sido sometida al proceso de evaluación.



METODOLOGÍA

Puesto que no existen antecedentes suficientes para realizar un análisis de viabilidad poblacional (AVP) para ninguna de las especies de plantas de la IV Región de Coquimbo, para estimar el riesgo de extinción se utilizó una serie de indicadores que describen la abundancia de la especie, su distribución y representación en las distintas formaciones vegetales, su estructura poblacional, los impactos directos sobre la especie y sobre su hábitat.

Las fuentes de información para la construcción de estos indicadores se sustenta en una Base de Datos de la Flora de la IV Región, constituida por más de 38.000 registros geo-referenciados de los herbarios de la Universidad de Concepción (CONC), Universidad de La Serena (ULS), Museo Nacional de Historia Natural (SGO), complementados con registros obtenidos en las campañas de terreno realizadas en los años 1999 a 2001 y datos de la literatura.

Los parámetros utilizados para estimar el riesgo de extinción en la región para cada especie pueden ser agrupados en:

1.- Aquellos parámetros que indican abundancia, área de ocupación y representación espacial de la especie.

2.- Aquellos parámetros que se relacionan con los procesos de decrecimiento poblacional producto de impactos específicos sobre la especie o destrucción de hábitat.

3.- Parámetros relacionados con características propias de las especies, como endemismo y forma de vida

Calceolaria picta

Drimys winteri

Escallonia revoluta

Jubaea chilensis

Lapageria rosea

Myrcianthes coquimbensis

Peperomia doelli

Pouteria splendens

Senna stipulacea